Economía y Tendencias

El consumo colaborativo ayuda a suavizar el impacto de la crisis

Entre las propuestas de esta forma de consumir que se pueden aplicar al turismo está el compartir coche o casa

Publicada 03/04/2014

13:43 horas

 - Actualizada 04/04/2014

8:47 horas

El consumo colaborativo “genera relacionas y confianza entre la gente que no se conoce”, según Creus.

El consumo colaborativo “genera relacionas y confianza entre la gente que no se conoce”, según Creus.

“La crisis ha afectado a la economía, al medioambiente y a los valores”, así lo afirma Mar Alarcón Fundadora y CEO de Socialcar, quien cree que estamos en una era de cambio en la que “podemos hacer las cosas de otra manera”, un ejemplo de ello es el consumo colaborativo, el tema central de la mesa ‘Peer to peer’ que ha tenido lugar este jueves en el Forum TurisTIC.

Ante el desarrollo de esta tendencia de consumo colaborativo durante los últimos años, Javier Creus, Fundador de Ideas for Change, explica que el consumo colaborativo “genera relacionas y confianza entre la gente que no se conoce”.

Asimismo, Creus explica que “hace posible desplazarse ocupando una plaza libre en un coche particular que va en la misma ruta; alojarse en el sofá, una habitación o un apartamento particular gratis o a un precio moderado; comer y cenar en casas de personas con afición a la cocina u organizar tus actividades con locales de cada sitio con los que compartes intereses o aficiones”.

Concretamente, SocialCar nació en enero de 2011, ofreciendo en toda España el primer servicio de alquiler de vehículos entre particulares a través de su plataforma online. “Aportamos soluciones sostenibles, además de poner en valor vehículos infrautilizados que se alquilan a personas que necesitan el coche, ya sean locales o extranjeros”, matiza Alarcón.

En todo momento, SocialCar establece una serie de garantías, con seguros y valoraciones que fomentan la confianza entre los usuarios.

El consumo colaborativo también se aplica al alojamiento. Juanjo Rodríguez, fundador y CEO de Knok informa que su compañía es la primera red de viajes para familias. “Conectamos con familias de confianza en todo el mundo, que buscan viajes únicos e inolvidables tanto para ellas como para sus hijos”, explica.

En Knok, una familia ofrece su casa cuando no va a estar allí para otros viajeros que viajan con hijos, “se alojan en su casa sin pagar nada, a cambio de dejar la suya”. Además, la web ofrece guías de viajes enfocadas al turismo familiar, creadas con recomendaciones de las familias que viven en el destino.

“Con esta forma de viajar pones en valor la casa infrautilizada cuando no está siendo utilizada. No solo es por un tema de coste, se quedan porque poder hacer vida en casa, aunque no sea la tuya, ayuda a estar más descansado. Hay más espacio que en una habitación de hotel, los niños encuentran juguetes en esa casa, entre otras ventajas”, afirma el fundador de Knok.

Knok valida y ofrece seguro de hogar que cubre cualquier cosa que ocurra cuando están fuera pero “no ha habido necesidad de utilizarlo porque la realidad es que la gente se comporta mejor cuando no está en su propia casa”.

Rodríguez concluye que “más del 90% de las familias que prueban a compartir su casa se convierte en miembro fiel y viaja más que si tuvieran que alojarse en un hotel”.

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