Los paros se producirán justo en una de las operaciones salida de verano con más movimientos.
Los sindicatos de Adif han convocado a los trabajadores del gestor público de infraestructuras ferroviarias a secundar 46 horas ininterrumpidas de huelga, entre el 31 de julio y el 1 de agosto, coincidiendo así con una de las operaciones salida de verano.
El paro arrancará a las 1:00 horas del 31 de julio y se extenderá hasta las 23:00 horas del 1 de agosto y ha sido acordado por unanimidad por todos los sindicatos del comité de empresa de Adif (CC OO, UGT, CGT, Sindicato Ferroviario y Sindicato de Circulación), que además sopesan extender la huelga a Renfe.
Con esta convocatoria los sindicatos pretenden manifestar su rechazo a la decisión “unilateral” de Adif de realizar convocatorias de movilidad de los empleados que, según sus datos, “podría suponer el desarraigo de 400 trabajadores”.
El responsable de comunicación del sector ferroviario de CC OO, José Luis Esparcia, declaró a AGENTTRAVEL que “los paros están convocados por los incumplimientos reiterados del convenio colectivo por parte de la empresa en determinadas cuestiones, fundamentalmente las que tiene que ver con algo tan importante como el empleo”.
Los sindicatos con representación en Adif protestan también por la reestructuración que, según aseguran, está realizando la compañía pública en el área de mantenimiento de infraestructuras y por la exterminación de algunas actividades.
Esparcia explica que CC OO solicitó a Fomento y Adif la contratación de casi 5.500 personas nuevas, especialmente en el área de mantenimiento e infraestructuras.
“La falta de personal, la creciente privatización y externalización de actividad que deja sin empleo a trabajadores de la propia empresa, ha provocado que llegaramos al límite, la empresa no se sienta a negociar estas cuestiones y por lo tanto la convocatoria de huelga es la última salida que nos queda”, afirma.
Definir el futuro de los trabajadores
Asimismo, los sindicatos denuncian que Adif “no da solución” al millar de trabajadores que actualmente se ocupan de vender billetes de Renfe en las estaciones. Consideran que es necesario definir su futuro ante la inminente liberalización del sector y la entrada de nuevos operadores ferroviarios privados.
CC OO calcula que Renfe presenta un déficit de personal de más 1.139 trabajadores, por lo que contempla extender también las movilizaciones a la operadora.
Según dicha organización sindical, las dos empresas ferroviarias públicas tienen “las plantillas más reducidas de los ferrocarriles europeos, que rozan niveles insoportables, por lo que se resiente el servicio y la propia seguridad de los trenes”.
De su lado, UGT asegura que viene advirtiendo de los problemas existentes y considera que “existen razones suficientes para la convocatoria de paros mientras persista la actitud de la empresa, que no da opciones a la vía de la negociación”.
Por último, Esparcia indica que “en principio la convocatoria de paros es para estos dos días, pero no el sindicato no descartas más movilizaciones si la empresa continúa con esta política tan errónea”.
