Estados Unidos y Cuba han discutido este jueves “en un ambiente distendido” los “pasos prácticos” que deben dar ambos países para restablecer las relaciones diplomáticas con la apertura de embajadas en Washington y La Habana.

“Hemos estado intercambiando opiniones e ideas sobre los pasos prácticos que debemos dar para oficializar el restablecimiento de las relaciones diplomáticas en un ambiente de respeto y distendido”, ha dicho el portavoz cubano, Gustavo Machín, en una rueda de prensa celebrada en el Palacio de Convenciones de La Habana, nada más terminar las conversaciones bilaterales.

Machín ha explicado que las delegaciones “han empezado a hablar del proceso de restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países, a partir de las decisiones anunciadas por los presidentes de Cuba y Estados Unidos el pasado 17 de diciembre”.

Primeros contactos cara a cara

El pasado miércoles tuvo lugar el primer encuentro oficial entre las delegaciones de Estados Unidos y Cuba desde que sus presidentes, Barack Obama y Raúl Castro, anunciaran el pasado 17 de diciembre su deseo de normalizar las relaciones bilaterales.

El pasado jueves, la directora general para Estados Unidos, Josefina Vidal, como cabeza de la delegación cubana, y el subsecretario adjunto de Estado para el Hemisferio Occidental, Edward Alex Lee, abordaron cuestiones migratorias.

Las partes reconocieron “fluidez” en las conversaciones bilaterales, a pesar de sus “claras diferencias”, que se siguen centrando en la Ley de Ajuste Cubano y en la política de 'pies secos-pies mojados'.

Seguidamente, el viernes, se espera que la jefa de la delegación estadounidense, Roberta Jacobson, se reúna con la oposición en la Sección de Intereses de La Habana, según han informado varios disidentes a Europa Press.

Acuerdo histórico

El Gobierno cubano ha fijado su meta en el fin del bloqueo comercial, pero Obama ha advertido de que se trata de un objetivo a largo plazo, por lo que requiere la convivencia de la Casa Blanca y el Congreso.

De momento, la normalización ha comenzado con una serie de medidas que entraron en vigor el pasado 16 de enero, entre las que destacan la flexibilización de los viajes de los estadounidenses a Cuba y que las empresas de telecomunicaciones y financieras norteamericanas puedan hacer negocios allí.