Aerolíneas

Iberia se mantiene firme en su idea de hacer rentable el Puente Aéreo

Sopesa ceder la ruta a Iberia Express, Air Nostrum o Vueling para competir con el AVE

Publicada 05/03/2015

8:59 horas

 - Actualizada 05/03/2015

9:20 horas

Iberia acuerda con Airbus adelantar la llegada de los A330-200, que sustituirán a los A340-300.

Iberia acuerda con Airbus adelantar la llegada de los A330-200, que sustituirán a los A340-300.

El presidente ejecutivo de Iberia, Luis Gallego, ha asegurado este miércoles que “el Puente Aéreo no va a desaparecer” aunque compita con el AVE, que acapara más del 65% de los pasajeros entre Madrid y Barcelona.

Iberia quiere rentabilizar el Puente Aéreo Madrid-Barcelona, su ruta más deficitaria en el corto y medio radio, para lo que estudia varias fórmulas que pasarían por operar esta ruta a través de alguna de sus filiales, Iberia Express, Air Nostrum o Vueling, una solución que espera cerrar en el primer semestre de este año.

La ventaja del Puente Aéreo respecto al tren de Alta Velocidad son conexiones cada hora en vez de cada tres, pero para mantener la ruta entre las dos capitales Iberia debe invertir a pesar de que se trata de uno de sus trayectos “más deficitarios punto a punto”, pero que sí aporta tráfico de largo radio.

Y es que, el 65% de pasajeros se traen al ‘hub’ de Madrid, pero sólo el 35% parte desde el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.

“Hay que tener en cuenta que no solo se une la competencia por tierra, sino también por aire, al ser la mitad de ese 65% clientes que optan por las ‘low cost’, “ya que dan la seguridad por garantizada y priorizan por el precio”, ha afirmado Gallego en declaraciones a los Desayunos de TVE.

Iberia intenta adaptar su oferta a la demanda de cada vuelo con los aviones disponibles de Iberia Express, Vueling e incluso Air Nostrum, ha explicado Gallego.

Respecto a las nuevas medidas de control aeroportuario, efectivas desde el pasado domingo, Gallego señaló que “dificultan el proceso de embarque” por lo que espera que “no afecten a la puntualidad” de la compañía, que ha logrado situarse entre las más puntuales del mundo.

La reestructuración ha sido un éxito

Gallego puso en valor el proceso de reestructuración iniciado en 2012 por Iberia, que calificó de un “éxito”, tras poner freno “a la sangría de la caja y bajar los costes” en una compañía que entonces no podía competir con las ‘low cost’ ni con otros operadores.

Tras seis años de pérdidas, Iberia ha logrado un resultado operativo de 50 millones de euros, inmersa en un plan de futuro, y en un contexto en el que hasta 2025 no habrá subida de tasas aeroportuarias en el nuevo marco regulatorio.

En la actualidad, tras el acuerdo producido el primer trimestre de 2014 con los trabajadores y finalizado el ERE de 2013, existe otro expediente de regulación de empleo abierto que afecta a 1.427 puestos --244 pilotos y el resto personal de tierra-- por “mutuo acuerdo voluntario”. “Hemos dado la vuelta en dos años a la compañía gracias a los empleados, no solo financieramente sino que ha mejorado la percepción del cliente”, señala.

Gallego subrayó que la aerolínea ha renovado el 80% de su flota y espera la llegada de los ocho nuevos A330-300 a finales de este año. Iberia ha llegado a un acuerdo con Airbus para adelantar la llegada de los ocho A330-200, que la compañía encargó el año pasado, y que se incorporarán entre diciembre de 2015 y noviembre de 2016, lo que supone un adelanto de hasta 14 meses sobre las previsiones iniciales.

Estos aviones vienen a sustituir a los A340-300, por lo que su entrega anticipada permite “acelerar la renovación de la flota de largo radio con ventajas económicas, medioambientales y de atención al cliente”, ha destacado la compañía.

Tan española como siempre

Por otro lado, el presidente de Iberia ha defendido que la aerolínea “sigue siendo tan española como ha sido siempre, desde su fundación en 1927”, al mantener 17.000 puestos nacionales, invertir y comprar aviones construidos en el país.

Pertenecer al grupo IAG, que puja por hacerse con Aer Lingus, supone adaptarse a la “consolidación del mercado”, como demuestra la unión de Air France con KLM o la entrada de Etihad en la italiana Alitalia, y otras fallidas como la caída de Spanair en el proceso, según Gallego.

IAG permite mantener la identidad, clientes y cuentas de resultados sumando el ‘hub’ del Atlántico norte con el del Atlántico sur. “Había que pertenecer a un grupo, e IAG es una de las referencias en Europa, o quebrar”, zanjó.

El presidente de Iberia no teme la entrada de Qatar Airways como inversor de IAG, que valora como “una muy buena señal que demuestra que el grupo tiene porvenir”.

En cuanto a Venezuela, asegura que mantendrán los vuelos a pesar de que no pueden repatriar el dinero que hay en el país –más de 200 millones de euros–, por lo que están ajustando la oferta a la demanda, en espera a llegar a un acuerdo con el Gobierno venezolano.

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