El objetivo de la especialización hotelera es mejorar la calidad del servicio como incentivo para la elección de Castilla y León como destino turístico.
La Junta de Castilla y León ha apostado por especializar los alojamientos hoteleros de la Comunidad para propiciar la diversificación de la oferta y adaptarla a la nueva demanda del sector con la inclusión de figuras como el Hotel Familiar, Hotel Gastronómico, Hotel Balneario y Hotel con Historia a las que se sumarán las de Hotel de Congresos y Eventos, Hotel Enoturístico y Hotel de Salud mientras que en el caso de los hostales sólo se podrán especializar como hostal con historia.
Según ha explicado la portavoz de la Junta, Rosa Valdeón, la nueva regulación será un nuevo instrumento de control de las actividades clandestinas ya que al regular esa actividad se somete a unos requisitos, tanto para categorizarse como para obtener una especialización y, en caso contrario, serán sancionados.
En este sentido, Valdeón ha aclarado que, al igual que ocurrió con las casas rurales, se ha fijado un régimen transitorio con “tiempo suficiente” para la adaptación para que los establecimientos que están inscritos en el Registro de Turismo de Castilla y León y que siguen en activo puedan continuar sin necesidad de adecuarse a la nueva normativa, “a no ser que realicen modificaciones sustanciales, cambio de categoría o quieran especializarse”.
De acuerdo con los datos que constan en el Registro de Turismo de Castilla y León, a fecha de 31 de agosto de 2015, están inscritos 1.918 alojamientos hoteleros, que representan un 27,66% del total de establecimientos de alojamiento que existen en la Comunidad.
Distintivos para identificar las especialidades
Otras novedades son la creación de distintivos nuevos para identificar la especialidad o especialidades que tengan los establecimientos de alojamiento hotelero y que en toda la publicidad que se realice del establecimiento de alojamiento hotelero deberá constar el número de Registro de Turismo de Castilla y León.
En cuanto al régimen de funcionamiento de los establecimientos de alojamiento hotelero, se contempla el sistema de reservas, precio y facturación, así como el acceso a la información de los usuarios.
Por su parte, el número de plazas de los alojamientos hoteleros es de 72.016 que representan un 43% del total de plazas existentes, “lo que refleja la dimensión de este sector dentro de las plazas ofertas de alojamiento turístico en Castilla y León”, ha indicado Valdeón quien ha reconocido la "especial importancia" del sector turístico por la actividad que genera.
El objetivo de esta normativa, que entrará en vigor al mes de la publicación del Decreto en el Bocyl, es dotar a la Comunidad de un instrumento jurídico que mejore la calidad del servicio como incentivo para la elección de Castilla y León como destino turístico.
La nueva norma desarrolla las previsiones del vigente Plan Estratégico de Turismo de Castilla y León 2014-2018 y ha tenido en consideración la homogeneización de la clasificación y categorización de los establecimientos hoteleros.
