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Algunos países que están fuera de la UE y del espacio Schengen han suscrito acuerdos con las autoridades comunitarias para agilizar los visados.
La resultado de la votación del referéndum del pasado 23 de junio, que decidió la salida de Reino Unido de Europa, podría obligar a los turistas británicos a pagar un visado de 50 libras (59 euros) cada vez que viajen a algún país europeo.
Al no pertenecer a la Unión Europea y estar fuera del espacio Schengen, los viajeros británicos podrían hacer frente al pago de este visado. En la actualidad, los residentes no comunitarios que deseen visitar la zona Schengen tienen que pagar un visado por importe de 50 libras (59 euros).
La ministra de Interior británica, Ambar Rudd, ha insistido en que estos trámites no son una exigencia de la Comisión Europea, aunque no puede descartarse este pago del visado, en una entrevista a ‘The Guardian’.
Con un visado Schengen, un turista puede viajar a cualquiera o a todos los países del espacio Schengen durante el tiempo de validez de su visado, aunque por un máximo de tres meses en un periodo de seis meses. No obstante, algunos países que están fuera de la UE y de este espacio han suscrito con la UE acuerdos de facilitación de visados para agilizar su solicitud de visado de corta duración. Lo mismo ocurre a nivel nacional en algunos países.
Las reacciones en reino Unido no se han hecho esperar. El laborista Andy Burnham aseguró que es “un ejemplo más de la deriva y la confusión que vive el país como resultado de la incapacidad del gobierno para planificar Brexit”.
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