El grupo hotelero Meliá Hotels International ha realizado la apertura de su nuevo establecimiento en Madrid, el Gran Meliá Palacio de los Duques, que surge de la renovación del antiguo Ambassador, cuya reforma y actualización supuso una cantidad de 30 millones de euros. El nuevo hotel ya forma parte del selecto club internacional Leading Hotels of the World.
En la ceremonia de apertura participaron el director general de hoteles de la compañía, André Gerondeau; el director de la división EMEA, Enrique Ortiz; la directora del Hotel, Inmaculada Palencia; el arquitecto responsable del proyecto de reforma, Álvaro Sans; y también contaron con la visita de los hermanos Sergio y Javier Torres, dueños del restaurante ‘Dos Cielos’ de Barcelona, que han abierto uno nuevo en el hotel de Madrid.
La intención de Meliá es trabajar en un contexto futuro de 30 a 35 hoteles nuevos, con una previsión aproximada de clientes para el nuevo Gran Meliá de un 25% de turistas españoles y un 75% de visitantes extranjeros, de los que un 40% se pretende que sean americanos.
André Gorondeau afirma que tienen “más de 40.000 colaboradores en todo el mundo y un gran compromiso con todos los lugares en los que están presentes”, también añadió que están trabajando con una “visión de expansión internacional, gestión y desarrollo de talento y personas y con un compromiso para convertirse en una compañía sostenible”.
Servicios especiales del hotel
Por otro lado, Enrique Ortiz explicó que la estrategia de posicionamiento de Meliá con este hotel consiste en “la oferta de un servicio personalizado e intuitivo, de varias experiencias excepcionales y la expresión de la cultura española en su versión más moderna” todo esto realizado a través de la “cultura y herencia tradicional española, un servicio omnipresente, atento y discreto, y una dedicación a la relación personal”.
Para Inmaculada Palencia “el equipo humano será lo que convierta este hotel en el mejor de la ciudad”. Aseguró que disponen de 20 suites, una terraza exterior con vistas al Madrid histórico y tradicional, además de tres restaurantes especializados en los diferentes gustos del cliente: el bar de tapas Coroa, la vinacoteca Montmatre y el restaurante contemporáneo con material histórico ‘Dos Cielos’.
Álvaro Sanz se centró en explicar la política de “evolución” del hotel, ya que antes de sus reformas, el establecimiento era un palacio ducal y un convento. Para el arquitecto “es necesario escarbar y descubrir los objetos de valor”.
Sanz afirma que uno de los elementos históricos más importantes del establecimiento es Velázquez, ya que su interior se encuentra repleto de representaciones de obras suyas como ‘Las Meninas’. Declaró que “aunque Velázquez fue un pintor sevillano siempre ha sido una figura vinculada a Madrid”.