El mayor grupo turístico del mundo, TUI Group,registró un beneficio neto atribuido de 644,8 millones de euros en su último ejercicio fiscal, finalizado el 30 de septiembre, lo que supone un descenso del 37,8% frente a un año antes cuando logró ingresos extraordinarios por la venta de Hotelbeds Group, y pese a los costes derivados del cese de operaciones de Air Berlin y de las bajas médicas en su aerolínea TUIfly.
En concreto, tuvo que afrontar un impacto de 24 millones de euros por las bajas médicas en una de sus aerolíneas, así como un gasto de 15 millones de euros derivado de la insolvencia de Air Berlin.
También hay que tener en cuenta que el mayor grupo turístico del mundo vendió a finales de abril de 2016 el proveedor de servicios de viajes con sede en Palma, a la firma europea de capital riesgo Civen, por lo que obtuvo unos ingresos de 1.200 millones de euros en el anterior ejercicio.
En su último ejercicio, la facturación del grupo alemán alcanzó los 18.535 millones de euros en su último ejercicio fiscal, un 8,1% más que los 17.154 millones de euros contabilizados en el precedente, que se vio afectada por la debilidad de la libra esterlina en mercados donde opera.
Tres años a doble dígito
El director general de TUI Group, Fritz Joussen, ha destacado que “por tercer año consecutivo, hemos obtenido un resultado operativo que muestra un crecimiento a doble dígito” y ha subrayado que “más de la mitad de nuestras ganancias han sido generadas por las compañías de cruceros y los hoteles de TUI”.
Joussen defiende la estrategia de “centrarse en las inversiones en hoteles y cruceros con alto margen de beneficios” emprendida por el grupo tras la fusión de 2014.
En concreto, el 56% de los beneficios actuales del grupo son generados por sus propios hoteles y las compañías subsidiarias de cruceros.