El ministro de Turismo de Egipto, Hisham Zaazu, presentó ayer su dimisión en protesta por el nombramiento de un miembro de Gamaa al Islamiya, un grupo radical islamista, como gobernador de Luxor.
“Zaazu ha insistido en su salida”, ha dicho el portavoz ministerial, Rasha Azazi, quien ha agregado que el primer ministro, Hisham Kandil, ha solicitado al ministro que continúe en su cargo. Sin embargo, Zaazu ha rechazado esta opción, según ha informado el diario egipcio ‘Al Ahram’.
El propio Kandil ha confirmado poco después haber rechazado la dimisión del ministro y ha destacado que el Gobierno ”trabaja para mejorar el turismo de todas las formas posibles”.
Zaazu, un tecnócrata independiente, fue nombrado al frente del Ministerio de Turismo en 2012. Anteriormente fue asesor del exministro del ramo Munir Fajri Abdel Nur.
El nombramiento de Adel Asaad al Jayat ha encontrado un firme rechazo en Luxor, y activistas y trabajadores del sector turístico de la localidad anunciaron el pasado martes que cerrarán todos los puntos turísticos de la ciudad si no es cesado o presenta su dimisión.
Al Jayat, que fue nombrado el domingo al frente de la gobernación por el presidente, Mohamed Mursi, ha hecho frente a manifestaciones y críticas desde entonces por su pertenencia al Partido Construcción y Desarrollo, brazo político de Gamaa al Islamiya.
El grupo es considerado responsable del atentado terrorista de 1997 contra el Templo de Deir el Bahari, en Luxor, que se cobró la vida de 58 turistas extranjeros y cuatro ciudadanos egipcios.
Asimismo, el nuevo gobernador de Luxor fue arrestado sin cargos por las autoridades egipcias en el marco de la represión contra grupos islamistas tras el asesinato en 1981 del entonces presidente Anuar el Sadat.
La Gamaa al Islamiya se enraíza en el salafismo y varios de sus líderes han expresado hostilidad en varias ocasiones en los últimos años hacia los monumentos preislámicos del país, que consideran paganos.