El presidente de la Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas (Acave), Martí Sarrate, ha calificado la tasa municipal que quiere imponer el Ayuntamiento de Barcelona a operadores turísticos para visitantes que no pernoctan en la ciudad de “más recaudatoria que disuasoria”, según declaraciones a AGENTTRAVEL.

Sarrate argumenta que, por ejemplo, “el turista que viene a la costa de Cataluña ya paga una tasa turística en el hotel, por lo que si visita Barcelona sufriría una doble tasación y creo que no es legal”.

Añade que “un autocar que viene a Barcelona genera riqueza, porque la gente realiza compras, visita museos, la agencia contrata guías o se paga un parking entre otras cosas”.

Para el presidente de Acave, este impuesto va a ser muy “difícil” de controlar porque “cómo se va a saber cuántos autocares van a Barcelona y cuánta gente llevan”.

Por otro lado, considera que este gravamen turístico es “discriminatorio” porque a los turistas que acceden a Barcelona en tren no se les va a cobrar.

Asimismo, Sarrate recuerda a los responsables municipales que “una cosa es gestionar el turismo y otra imponer tasas que no lo van a frenar porque nadie va a dejar de visitar Barcelona porque tenga que pagar uno o dos euros”.

Preocupación en Acave

El presidente de Acave incidió en su gran preocupación por este nuevo impuesto ya que tienen asociadas varias agencias de receptivo y la medida les podría afectar.

Además, recuerda que “llevamos desde octubre de 2016 negociando con el Ayuntamiento una tasa de 45 euros para los autocares (un máximo de 70 euros diarios) que estacionen en la ciudad, lo que supone otro impuesto más”, añade Sarrate.

Por último, indica que “Barcelona se ganó una buena imagen con los Juegos Olímpicos y el Año Gaudí y sería una pena perderla con los temas relacionados con la turismofobia”.