Las reservas futuras para el verano (julio-agosto) están actualmente un 78% por debajo de los niveles de febrero de 2019, según IATA.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha actualizado las previsiones de la industria del transporte aéreo y retrasa su recuperación hasta 2022. Esta nueva revisión empeora las estimaciones previas en las que se estimaba que el sector volvería a estar en positivo en los últimos meses de este año.
La estimación inicial por parte de IATA era que se registraran unas pérdidas de 48.000 millones de dólares (39.256 millones de euros), cifra que se ha visto elevada al rango entre los 75.000 millones de dólares (61.337 millones de euros) y los 95.000 millones de dólares (77.694 millones de euros) en el peor de los escenarios.
“Si los gobiernos no pueden abrir las fronteras, necesitaremos que abran sus carteras con ayudas financieras para que las aerolíneas sigan siendo viables”, afirmó el director general de la IATA, Alexandre de Juniac en un comunicado.
IATA explica estas peores previsiones en un débil comienzo de 2021, que será peor de lo anticipado debido a los gobiernos de todo el mundo han endurecido las restricciones de viajes en respuesta a las nuevas variantes de COVID-19.
Así, según sus estimaciones, las reservas futuras para el verano (julio-agosto) están actualmente un 78% por debajo de los niveles de febrero de 2019.
Una “adecuada planificación” es “vital”
La organización de transporte aéreo considera “vital” que los gobiernos y la industria estén completamente preparados para reiniciar el negocio en el momento en que los gobiernos consideren que es seguro abrir fronteras.
Para ello consideran fundamental una adecuada planificación por parte de los gobiernos para un reinicio de operaciones ordenado y seguro, un pasaporte sanitario que permita a las aerolíneas establecer un protocolo para garantizar la seguridad en los vuelos, así como estándares globales para registrar pruebas y vacunas y un plan para registrar a los que ya han sido vacunados.
