Reinventarse en el sector de la aviación y cómo hacerlo

El año 2020 ha sido un año complicado para todos. Un momento de creación de nuevos escenarios, de miedo a pasos en falso, incluso, en ocasiones, de supervivencia ante cancelaciones de vuelos y ruta o de situaciones realmente duras de muchos compañeros y empresas. Pero el año 2021 se presenta como el año de las nuevas oportunidades. Por eso, queremos hablar sobre qué supone reinventarse en el sector de la aviación y cómo hacerlo.

Para empezar, es necesario plantearse el modelo que la empresa está llevando a cabo y cómo encaja con la situación actual. Nuevas oportunidades, nuevos mercados, nuevos retos… Así se puede definir esta etapa y hay que estar preparados para enfrentarla. Preguntarnos qué puede funcionar y qué deberíamos cambiar tras la pandemia y crear una estrategia adecuada serán básicos para empezar a volar.

 Así, una de las claves es encontrar a buenos compañeros de viaje. En un sector que más que nunca presenta una fuerte tendencia a la concentración, todos debemos estar preparados para trabajar juntos e interpretar el nuevo contexto acertadamente. Por ejemplo, son muchas las compañías aéreas que han decidido colaborar con un GSA, como Summerwind, consiguiendo así evitar gastos fijos que ahora resultan insostenibles. Es el momento de ampliar miras. En nuestro caso, perfeccionando la estrategia en Latinoamérica, colaborando con nuevos socios que le darán un gran valor añadido a nuestro trabajo allí y que nos harán crecer exponencialmente en la región.

Esto provoca que todos los eslabones de la cadena creen un servicio adecuado a un momento de inestabilidad y de cambio constante, lo que nos obliga a invertir en apoyo “desde dentro”. Es necesario un back office que garantice a las compañías una atención satisfactoria para pasajeros y empresas ante la incertidumbre. Desde Summerwind, y con el apoyo de algunas compañías aéreas, la decisión fue -y sigue siendo- ampliar a 20 horas diarias este servicio de forma totalmente voluntaria.

 ¿Y quién viajará estos meses? Los vuelos corporativos o laborales, sector en el que se ha impulsado el teletrabajo, mantendrán, en parte, su ya acusada disminución -o, al menos, no se recuperarán de forma tan rápida-. Pero, como afirmaba mi compañero Federico Lledo, “una videoconferencia no reemplaza el olor del curry en Delhi o el abrazo de tu padre después de un año sin verlo”. Será el turismo emisor y el tráfico étnico los grandes aliados de la industria aérea durante este 2021. Por supuesto, si hablamos de pasajeros, otro factor importante será la garantía y sensación de seguridad que podamos ofrecer. Demostrar a los clientes que estarán más seguros que nunca viajando con nosotros, incluyendo el factor sanitario como una prioridad.

Ser conscientes del contexto. Uno de los puntos más importantes, sin duda. Nuestras empresas están formadas por trabajadores. Somos personas y tenemos que tender nuestra mano si podemos ayudar. Al inicio de la pandemia, Summerwind colaboró en vuelos humanitarios y de repatriación, que tanta falta siguen haciendo en diferentes lugares del mundo. Pero juntos, podremos hacer muchas más cosas en un momento tan complicado para millones de personas.

Sabemos que no dejamos de leer malas noticias, pero, desde Summerwind nuestra visión es esperanzadora, creemos en las nuevas oportunidades y en que el reto está en identificarlas correctamente. Hemos aprendido de las adversidades, sabemos qué suelo pisamos -o sobre cuál queremos volar- y estamos preparados. Vamos a salir reforzados, personal y profesionalmente.