Marín ha destacado que el adelanto de apertura de la planta hotelera “es otro síntoma muy positivo”.
El vicepresidente de la Junta de Andalucía y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Juan Marín, ha valorado la perspectiva turística de cara al verano, asegurando que hay “un ánimo bastante positivo porque estamos viendo cómo va creciendo el número de reservas de una forma muy rápida y eso es un buen síntoma de cómo va a ser este verano”.
“Creemos que, incluso, se pueden superar las previsiones que inicialmente teníamos a medida que van pasando las semanas y esos sería, sin lugar a dudas, una magnífica noticia para un sector que ha estado tan castigado durante 2020 y que ahora, por fin, empieza a ver esa recuperación”, ha destacado, aludiendo, además, a que las reservas también del turismo británico, uno de los principales mercados, para los próximos meses “también se están ya acelerando”.
Así lo ha señalado Marín antes de participar este viernes en Málaga en el foro ‘El Turismo del Futuro’, organizado por el periódico La Opinión de Málaga.
También el consejero andaluz de Turismo ha añadido que el adelanto de apertura de la planta hotelera “es otro síntoma muy positivo, y, especialmente, en la Costa del Sol y en todo lo que es el turismo de sol y playa, que se ha adelantado casi un mes”. En este sentido, ha valorado que ello significa, además, que muchos trabajadores hayan podido salir de los ERTE y se hayan incorporado a sus puestos de trabajo. “Estamos muy satisfechos”, ha reiterado.
Así, ha dicho, “optimismo y positivismo” pero también “escuchando por si todavía podemos mejorar algo para que este verano la recuperación sean mayor”.
“Estamos acabando, precisamente ya, con las resoluciones de todas las ayudas que se han ido sacando desde Turismo, más de 1.081 millones de euros en total y, evidentemente, todavía tenemos margen para poder activar algunas otras líneas de ayudas”, ha dicho, admitiendo que "ahora tenemos un poco más de dificultad” para poderlas aprobar por “la posición de algunos grupos parlamentarios desde hace algunos días”.
Las reservas británicas se aceleran
Por otro lado, ha lamentado que Reino Unido aún no ha puesto a España en el semáforo verde para poder viajar debido a la incidencia de COVID-19, pero “estamos convencidos de que a lo largo del mes de junio esta noticia también se producirá” y, de hecho, ha continuado, “las reservas también del turismo británico para los próximos meses también se están ya acelerando”.
Cuestionado, en concreto, por cómo cree que será la reacción del Gobierno británico en relación con la COVID-19 en Andalucía, Marín ha explicado los datos de Reino Unido “los están barajando de una forma diferente a lo que muchos podemos tener como concepto”, como así se lo trasladó en la reunión que mantuvo con el embajador de Reino Unido hace unas semanas.
“Esto no va de cuántos casos haya por cada 100.000 habitantes, sino de otros condicionantes que le permitan también, en este caso, al ministro de Turismo y de Exteriores de Reino Unido dar esa autorización para que el semáforo pase de ámbar a verde”.
Así, ha recordado “la intención” del Gobierno británico de que este tipo de decisiones se adopten no por comunidades, sino por países, por lo que cuando el semáforo se ponga en verde será para el conjunto del país. En relación con las islas, como las griegas, Baleares o Canarias, en suma cualquier archipiélago, ha precisado que sí contemplan un territorio mucho más acotado y afectan solo y exclusivamente a ese territorio.
“Estas son las previsiones que me trasladó el embajador y esperaba que a lo largo del mes de junio el semáforo se pueda poner en verde para España”, ha dicho.
Turismo residencial británico
No obstante, y aun así, ha incidido en que ya está llegando el turismo británico y “hay otros problemas relacionados con el turismo residencial británico en el que estamos trabajando de la mano del embajador”.
“Espero que también podamos hacerlo con otras comunidades a lo largo de estas próximas semanas con la intención de tener una posición común y poder plantearle al Gobierno de España y Reino Unido, especialmente, al de España, que podamos llegar a los 180 días de pernoctación de una persona que tenga segunda residencia en nuestro país, que sea británico, y no las limitaciones que tenemos ahora precisamente, por el Brexit, tal y como se acordó entre UE y Reino Unido que son de 90 días”, ha detallado.
“Estos los condicionantes que pone el Gobierno británico "entiendo que por seguridad de sus conciudadanos y desde el respeto a esas decisiones o que vamos a colaborar para que sea lo más inmediato posible”, ha concluido.
