En el interior de la nueva sala VIP se revela un ‘ojo de pista’, una ventana abierta a la pista del aeropuerto.
La aerolínea Air France ha inaugurado su nueva sala VIP en la terminal 2F de París-Charles de Gaulle, diseñada por la agencia Jouin Manku. El espacio, todo curvas y versatilidad, es abierto, aireado y comprensible a primera vista, según explica la compañía en un comunicado.
Dedicada a los clientes Business y Flying Blue Elite Plus de la red de corta y media distancia de Air France en el espacio Schengen, ésta es una de las salas VIP más grandes de la compañía, con una superficie de 3.000 metros cuadrados y 570 asientos repartidos en dos niveles
Todos los materiales, como piedra de lava, madera o las pieles y tejidos han sido rigurosamente seleccionados. Se utilizan los colores distintivos de Air France, así como el acento, el símbolo de la marca Air France, y el hipocampo alado, símbolo histórico de la compañía, que recuerda su fructífera historia.
Tras cruzar una pasarela, los clientes de Air France son recibidos por los equipos de la compañía en la entrada de la sala VIP. Para una mayor fluidez, las puertas permiten a los pasajeros escanear su tarjeta de embarque y acceder directamente a la sala. También dispone de una consigna para equipaje y de una vitrina con accesorios de viaje de Air France Shopping.
Los clientes se encontrarán con una escultura que une la zona de recepción y la sala VIP, inspirada en las alas de un avión. En su interior, se revela un ‘ojo de pista’, una ventana abierta a la pista del aeropuerto que atraviesa todo el espacio y acoge la luz que ilumina la sala.
La conexión Wi-Fi es gratuita y hay numerosas tomas de corriente para cargar los dispositivos eléctricos. Un área de clientes Flying Blue Ultimate, accesible directamente desde la recepción, ofrece un servicio personalizable e incluye varios salones privados.
Oferta culinaria y de relax
En lo que respecta a la restauración, los quioscos gourmet están situados en cada nivel. La oferta culinaria evoluciona a lo largo del día. Para comer algo rápido hay mini sándwiches, ensaladas y quiches calientes. También se ofrecen alternativas en un mostrador especial: tortitas por la mañana, platos del día elaborados por un chef a la hora del almuerzo y servicio de aperitivos.
Los quesos y los postres completan el menú pensado al estilo bistró francés. La bodega, seleccionada por Paolo Basso, mejor sumiller del mundo en 2013, ofrece una amplia selección de vinos y champanes. Por último, un amplio espacio "detox" que cuenta con una amplia variedad de infusiones.
En un enfoque eco-responsable, Air France favorece los productos regionales y de temporada. Además, para limitar el consumo de plástico de un solo uso, la compañía pone a disposición de sus clientes fuentes de agua en toda la sala VIP. También presta especial atención a la clasificación y el reciclaje selectivos de los productos de restauración.
En la planta superior, los viajeros que dispongan de más tiempo encontrarán zonas de descanso en la planta superior. Hay una zona dedicada con tumbonas para tumbarse y numerosos sillones.
Por último, una zona de tratamientos Clarins ofrece a los clientes descubrir el concepto ‘Traveller Spa’. Se proponen cuidados faciales de 20 minutos a medida. También hay una zona de bienestar con diez duchas y un vestuario.
