Los sindicatos piden “una subida salarial acorde con los esfuerzos realizados durante estos largos años de pandemia”.
Frente a la huelga programada por los tripulantes de cabina (TCP) en las oficinas de Iberia en Madrid para el próximo viernes 26 de agosto, la aerolínea ha comunicado que se muestra dispuesta a comenzar cuanto antes la negociación del decimoctavo convenio colectivo de la compañía para sus TCP, en plena oleada de conflictos laborales en el sector aéreo español.
La compañía aérea se dispone así a negociar el convenio a partir del próximo 15 de septiembre, fecha en la que se ha convocado una nueva reunión de la mesa de diálogo entre empresa y sindicatos.
Las negociaciones para la aprobación del nuevo convenio colectivo se iniciaron en junio de 2019 pero fueron suspendidas a comienzos de marzo de 2020 debido al inicio de la pandemia del coronavirus.
El pasado 7 de junio, se celebró una mediación ante el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) para reclamar la constitución de dicha mesa entre la dirección de Iberia y los sindicatos Sitcpla y Stavla, mediación que se cerró sin acuerdo.
De momento, las secciones sindicales han frenado cualquier intento de alentar una nueva huelga en el sector como están sufriendo otras compañías como Ryanair, o EasyJet a la espera de poner en marcha el diálogo.
Huelga el 26 de agosto
Los tripulantes de cabina de Iberia se concentrarán el próximo viernes 26, en las oficinas centrales de la compañía aérea para exigir la reapertura de la mesa para la negociación del nuevo convenio colectivo, según han informado los sindicatos convocantes.
Con esta convocatoria, promovida por el Sindicato de Tripulantes Auxiliares de Vuelos de Líneas Aéreas (Stavla), el Sindicato Independiente de Tripulantes de Cabina de Pasajeros de Líneas Aéreas (Sitcpla), el Sindicato Candidatura Independiente de TCP (La Candi), UGT y CCOO, los TCPs buscan presionar a la empresa para que reanude la negociación del XVIII convenio colectivo, la cual se paralizó con la llegada de la pandemia cuando se encontraba en su recta final.
Además de un “convenio digno” reclaman una subida salarial, ya que aseguran que llevan “diez años de salarios congelados”.
Los sindicatos aseguran que los empleados solo piden “un convenio justo” y “una subida salarial acorde con los esfuerzos realizados durante estos largos años de pandemia”.
