A finales de 2026 también se trasladará la actividad del muelle Barcelona Sud al muelle Adossat.
Con el objetivo de alejar la actividad de los barrios de la ciudad, el Puerto de Barcelona ha cesado este lunes la actividad de cruceros en el muelle Barcelona Nord tras zarpar el barco World Navigator, de la naviera Mystic Cruise, informa en un comunicado.
El cese de operaciones en esta zona permitirá liberar 630 metros de línea de muelle y se destinarán más de 13.600 metros cuadrados a nuevos espacios públicos de la ciudad.
Las operaciones de cruceros y ferris se trasladarán al muelle Adossat, “una zona mucho más alejada de los barrios de la ciudad”.
El Puerto de Barcelona prevé que se muevan hacia allí unas 340 escalas anuales, además de los servicios de Baleària con las Islas Baleares que ya se trasladaron en abril.
Al acto de despedida del último crucero que ha operado en la terminal ha asistido el presidente del Puerto de Barcelona, Lluís Salvadó, que ha apuntado que esta zona se “pondrá al servicio de todos los ciudadanos una vez finalice la 37 edición de la Copa América”.
Según él, el cierre de la terminal “es un nuevo paso para dar cumplimiento al acuerdo firmado en 2018 con el Ayuntamiento de Barcelona para eliminar las externalidades negativas que esta actividad pueda producir a los ciudadanos”.
Cierre del muelle Sud
El enclave portuario prevé terminar las obras del muelle Adossat a finales de 2026, año en el que también se cerrará la terminal del muelle Barcelona Sud.
El traslado de toda la operativa de cruceros a esta zona comportará unas inversiones de más de 270 millones de euros, a las que se deberán sumar los 80 millones de euros de los trabajos de electrificación del muelle, que ya han empezado.
