La prohibición a los cruceros de navegar por Venecia, por el canal entre la isla principal de la ciudad y la de la Giudecca, ha sido levantada por la Justicia italiana.
Un tribunal regional de Véneto ha suspendido la medida porque no se han habilitado rutas alternativas a los cruceros y los riesgos achacados a la navegación de los buques no están suficientemente probados.
Esta suspensión cautelar se prolongará hasta el mes de junio, a la espera de que vuelva a debatirse el impacto de los cruceros que navegan frente a la plaza de San Marcos.
Esta decisión viene a respaldar los argumentos de las grandes cruceristas que han negado que sus buques afecten negativamente a los canales venecianos.
Como se recordará, por orden del Gobierno italiano, desde el pasado 1 de enero estaba limitado el acceso de grandes buques de crucero a la laguna de Venecia y solo se permitía un cierto número de cruceros de más de 40.000 toneladas cruzar el canal de la Giudecca.
Además, a partir de noviembre de este año, estaba previsto que se se prohibiera de manera absoluta a los barcos de más de 96.000 toneladas cruzar el citado canal.
La decisión del Ejecutivo italiano obedecía a las protestas de los habitantes y autoridades de Venecia y ecologistas preocupados por el supuesto daño provocado por el creciente tráfico de cruceros en la frágil ciudad, uno de los destinos turísticos más populares del mundo.