El acuerdo conjunto, sujeto a la aprobación regulatoria, podría ejecutarse a mediados de 2015 y por un periodo de cinco años.
Las aerolínea Qantas y China Eastern han anunciado la creación de una nueva empresa conjunta, 'joint venture’, cuya solicitud de autorización presentarán a los reguladores australianos y chinos, con la que prevén ampliar el acuerdo comercial ya existente entre ambas aerolíneas para aumentar los vuelos entre Australia y China.
A través de la nueva asociación, las compañías aéreas esperan abrir nuevas rutas entre Australia y China continental, como por ejemplo desde Brisbane y Perth a Shanghai.
En un comunicado, ambas compañías, que operan en código compartido desde 2008, señalaron que el acuerdo conjunto, sujeto a la aprobación regulatoria, podría ejecutarse a mediados de 2015 y por un periodo de cinco años.
El acuerdo fue firmado por el consejero delegado de Qantas, Alan Joyce, y el presidente de China Eastern, Liu Shaoyong, en un acto al que asistieron el primer ministro australiano, Tony Abbott, y el presidente de la República Popular de China, Xi Jinping.
“Estamos deseando trabajar más estrechamente con China Eastern para reunir a nuestras redes complementarias y aumentar las opciones para el creciente número de clientes de Qantas que viajan a Shanghai y más allá”, dijo Joyce.
De su lado, China Eastern destacó la importancia de fortalecer la cooperación con Qantas para ofrecer mejores conexiones entre ambos países.
Beneficios a los pasajeros
La nueva alianza servirá de complemento a los acuerdos existentes entre Qantas y Emirates para las rutas en Europa, Oriente Medio y el Norte de África, así como la alianza entre Qantas y American Airlines para Estados Unidos.
Según el acuerdo, las aerolíneas ofrecerán importantes beneficios a los pasajeros de una y otra compañía tanto para viajeros corporativos entre Australia y China como para viajes de ocio.
China es actualmente el mayor socio comercial en bienes y servicios de Australia y se prevé que contribuya con más de 9.000 millones de dólares (7.198 millones de euros) a la economía australiana hasta 2020.
