Los europeos están buscando controlar sus gastos para no tener que renunciar a sus viajes.
Los europeos confían en su capacidad de gasto a la hora de viajar en 2024, a pesar de la presión del coste de la vida que atraviesa el continente, según el último informe de la hotelera Accor. Así, más de la mitad de los encuestados (54%) cree que contará con un mayor presupuesto para dedicar en viajes este año que en 2023, mientras que un 11% opina que dispondrá de menos dinero para el mismo fin. Además, España se sitúa como el país preferido de los viajeros europeos.
De las nacionalidades encuestadas (Reino Unido, Polonia, Alemania, Países Bajos, Francia, España e Italia), los polacos son los que se muestran más positivos sobre su situación financiera, con un 64% de ellos confiando en un aumento de su presupuesto frente al 7% que espera una disminución, seguido de los alemanes (61% y 13%, respectivamente). En contra, los viajeros italianos son los que se muestran más desconfiados, con un 44% esperando gastar más y un 12% con menos presupuesto.
En cuanto al número de viajes, se espera que la cifra se incremente sobre el pasado año en viajes internacionales por motivos de ocio, así como los que combinan con bleisure. De hecho, un 19% de los viajeros europeos espera hacer un viaje de estas características en 2024.
Entre los destinos preferidos, España destaca con el 23% de preferencia entre los europeos, seguido de Italia (18%), Francia (16%), Portugal y Grecia (13%). En cuanto al largo radio, destacan Norteamérica y Centroamérica (16%) y, en misma proporción, Asia.
Presión por los costes y mirando la sostenibilidad
Ante la subida generalizada de precios, los europeos están concienciados con vigilar sus gastos. Así, la mayoría (87%) está buscando reducir los mismos, ya sea buscando soluciones habitacionales más asequibles o reduciendo los regalos (27%) en ambos casos.
Entre las tendencias, un 71% de los viajeros confirma que la sostenibilidad es un factor relevante en la toma de decisiones sobre su viaje, siendo especialmente relevante en el caso de los italianos (82%). Le siguen España (78%), Polonia (77%) y Reino Unido (61%).
Además, adelantan que para el 77% de los europeos, el impacto sobre el clima de su actividad condicionará sus viajes, y se plantean volar con menos frecuencia (11%), volar menos (14%) y buscar alojamiento y proveedores de servicios sostenibles (10%).
No obstante, en este ámbito los europeos siguen siendo escépticos en el momento en el que ven su factura aumentada. De hecho, la presión de costes es para el 38% de los encuestados la principal limitación a sus viajes sostenibles, así como la falta de información (23%).
Extender la temporada
Una de las consecuencias del cambio climático y del alza de costes es que los viajeros están optando por extender sus viajes a lo largo del año. De hecho, el 32% de los europeos confirma que se irá de vacaciones fuera de temporada alta para reducir costes, mientras que el 19% lo hará para evitar olas de calor.
En cuanto a las recomendaciones, los amigos y familiares son los principales condicionantes del destino, con un 35% confirmando que influyen sus valoraciones en sus planes, mientras que el 29% se deja llevar por los comentarios y reseñas online. Además, también influyen los programas de fidelidad (6%) y la confianza en las marcas (17%). Además, un 16% busca viajar a los destinos que ha visto en programas de televisión o películas, y el 12% opta por los lugares vistos en redes sociales, porcentaje idéntico que reciben las recomendaciones de las agencias de viajes.
En cuanto al tipo de alojamientos, los hoteles son los más deseados, ya que el 65% confía en alojarse en uno de ellos este año. El coste y ubicación son los factores más relevantes a la hora de escoger el establecimiento, al igual que buscan un gran servicio en persona (21%), buena comida y bebida (37%), buen ambiente (17%) y sumergirse en el destino (11%).
Patrick Mendes, director general de las marcas premium, midscale y economy de Accor en Europa y Norte de África, ha asegurado que “2024 parece que será un año importante para los viajes europeos, ya que los consumidores le dan prioridad por encima de otras formas de gasto discrecional”.
