Los 11 complejos invernales del Pirineo de Lleida ponen las pistas y las instalaciones a punto para una temporada que arrancará a principios de diciembre.
Los complejos de esquí del Pirineo de Lleida afrontan la nueva temporada con una mejora de las instalaciones y de los servicios, después de haber invertido en obras relacionadas con el mantenimiento de las infraestructuras y la renovación de equipamientos. Este año, no obstante, la pandemia ha frenado algunas inversiones en equipamientos, inversiones que en parte se han redirigido a garantizar la seguridad sanitaria de trabajadores y clientes. Algunas estaciones ya han adelantado las novedades para esta sesión.
Baqueira Beret contará con una nueva balsa de agua, alimentada por el río Forcalh, que dotará la estación de más capacidad para abastecer de nieve artificial el sector de Beret. Serán unos 200.000 metros cúbicos de agua más para garantizar la nieve a lo largo de toda la temporada.
El complejo de la Val d’Aran y las Valls d’Àneu, que dispone de 115 pistas, 167 kilómetros esquiables y 36 remontes, ha hecho la puesta a punto de las instalaciones tanto con los habituales trabajos en pistas como en los establecimientos interiores, a fin de que la estación sea segura para clientes y empleados a nivel sanitario. Se prevé abrir las cuatro áreas (Baqueira, Beret, Bonaigua y Baciver) la primera semana de diciembre, siempre y cuando las condiciones lo permitan.
Para ofrecer más seguridad y rapidez en los trámites de los forfaits se ha mejorado la app móvil integrando el BaqueiraPASS y también se introduce un forfait recargable que permitirá la recarga online de los días de esquí, con lo que se evitará trasladarse físicamente a las taquillas cada vez que se suba a pistas.
Otros trabajos realizados sobre el terreno han sido el mantenimiento de remontes, edificios, máquinas y pistas que aseguran una apertura de temporada cada vez más amplia, ya que el objetivo de este invierno, si las condiciones meteorológicas acompañan, es acercarse al máximo a los 167 kilómetros de trazados disponibles a lo largo de Baqueira, Beret, Bonaigua y Baciver.
Espot Esquí, Port Ainé, Boí Taull y Port del Comte
Boí Taull tiene 45 kilómetros esquiables repartidos en 43 pistas y dos itinerarios, una pista exclusiva de trineos, 11 remontes y un snowpark con cinco zonas de diferentes niveles. Un año más se ha invertido en la mejora y adecuación de los equipamientos de la estación (remontes, maquinaria de pistas, vehículos de nieve y nieve artificial).
Hay que recordar que la estación ha pasado a formar parte del Grupo Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), el cual invertirá en los próximos diez años 13,5 millones de euros para renovar instalaciones eléctricas, telesillas, nieve artificial y aparcamientos (no se prevé que crezca el dominio esquiable).
Las estaciones de montaña de Espot Esquí y Port Ainé, gestionadas también por Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya, han efectuado diversos trabajos de mantenimiento y han planificado los preparativos para abrir a principios de noviembre, si hay suficiente nieve.
Este año Port del Comte ha centrado sus esfuerzos en asegurar las condiciones para el esquí. Para esta temporada ha potenciado el sembrado de las pistas, que asegura que con un grosor mínimo se pueda esquiar con seguridad, además de no encontrar piedras u otros elementos en los trazados.
Al mismo tiempo se ha reforzado el sistema de nieve artificial: la estación de esquí de Port del Comte cuenta actualmente con 256 cañones de nieve artificial, ha sumado cinco unidades más esta temporada. Serán de bajo consumo, porque otra de las iniciativas que han abrazado los responsables de este complejo invernal es la sensibilidad al entorno y ser lo más ecológicos posible.
La previsión de la estación del Solsonès, que tiene 39 pistas, 17 remontes y 50 kilómetros esquiables, es abrir por el puente de la Purísima, aunque si las condiciones climáticas lo permiten podría ser incluso antes.
Esquí nórdico
Las estaciones de esquí nórdico confían en atraer al turismo de proximidad que quiere hacer deporte sin grandes aglomeraciones, ya que este tipo de disciplina aporta seguridad a nivel sanitario en unas instalaciones rodeadas de espacios naturales.
Las estaciones de Aransa, Lles de Cerdanya, Tavascan, Baqueira Beret, Sant Joan de l’Erm, Tuixent-La Vansa y Virós-Vallferrera ofrecen más de 130 kilómetros para el esquí de fondo y un centenar de itinerarios marcados para raquetas. Los complejos exclusivamente de nórdico, agrupados bajo la marca Tot Nòrdic, abrirán las pistas cuando las condiciones meteorológicas lo permitan, probablemente en el mes de diciembre, hacia el puente de la Purísima.
Las estaciones de nórdico, que se preparan para abrir en diciembre, han aprovechado el verano para hacer tareas de mantenimiento y mejora de los circuitos tanto de esquí como de raquetas. También han invertido en renovación de material y mejora de la señalización y acondicionamiento de los edificios de servicios.
